El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, dimitió a su cargo tras la reciente presión de la opinión pública, así como la drástica sanción que le dictaminó la FIFA, a raíz de la controversia generada por besar, de manera no consentida, a la delantera española Jennifer Hermoso tras obtener el título mundial femenino.
En una declaración publicada en la plataforma X (antes Twitter), Rubiales dio a conocer el fin de su etapa a la cabeza del máximo ente del fútbol español, pese a que semanas atrás se negara a dejar el cargo.
“Hoy he transmitido a las 21:30 horas al presidente en funciones, el señor Pedro Rocha, mi renuncia al cargo de presidente de la RFEF. También le he hecho saber que también he dimitido de mi cargo en la UEFA para que se pueda cubrir mi puesto de Vicepresidencia”, se lee en el comunicado.
“Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta”, añadió.