¿Es posible la Reunificación de la Península Coreana a través del diálogo?

3
Las dos coreas

En los últimos días, el mundo ha experimentado una gran inquietud como resultado de las intensas amenazas de Norcorea y EEUU que hacían presagiar que estábamos al borde de una explosión nuclear con consecuencias apocalípticas. Desde luego, la guerra de palabras entre los presidentes Kim Jong-un y Donald Trump no son de reciente data. Kim Jong-un no sólo ha estado amenazando con un ataque nuclear, sino que ha efectuado varios lanzamientos que han sobrevolado el espacio aéreo de Japón, causando pánico en esta nación.

En noviembre pasado, Donald Trump visitó 12 paises asiáticos, por cierto, la más prolongada gira que un presidente norteamericano haya realizado durante su gestión. Los intereses de EEUU en esta región son enormes desde el punto de vista comercial, pues con China mantiene un déficit significativo, así como desde la óptica política y estratégica. EEUU mantiene bases militares en Corea del Sur y Japón, siendo la de Yakota (al oeste de Japón) la más grande y desde donde se produjeron los ataques balísticos durante la llamada “Guerra de Corea” que destruyó la mayoría de ciudades norcoreanas, arrojando un saldo de dos millones de bajas norcoreanas, así como la división de la Península; guerra que además no concluyó con un tratado de paz en 1939, sino con un armisticio, es decir, técnicamente, un cese de hostilidades.

Sería largo exponer la historia de conflictividad entre los países que conforman el Noreste de Asia (Corea, Japón y China), de modo que para los efectos de este breve artículo sería suficiente entender su importancia regional en términos de hiperdesarrollo industrial, tecnológico y comercial, como lo demuestran sus patentes mundialmente reconocidas; acompañado de su modernidad urbanística y tremendo desarrollo económico. Sin embargo, Norcorea quedó como el “patito feo” de la región; devastado por la guerra, las hambrunas y sobreviviendo gracias a la solidaridad de China. ¿Cómo entonces se armó militarmente? También tendríamos que preguntarnos: ¿Cómo Corea del Sur que tenía una población y un PBI similar a Perú hace poco más de 40 años, es la 9na. economía mundial? En consecuencia, el país norcoreano encajonado y arrinconado tenía, lamentablemente, que tener este desenlace.

Las potencias nucleares, como EEUU, China y Rusia (miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, junto con Gran Bretaña y Francia), tenían que haber sabido dos importantes evidencias: (a) si EEUU atacara a Norcorea significaría también que sus aliados (Japón y Corea del Sur) se verían afectados por la proximidad geográfica, y (b) la tecnología misilística nuclear no ha alcanzado aún el nivel de precisión de lanzamiento, ni se ha llegado a verificar la correlación entre la carga nuclear y la velocidad de despegue.

En estas circunstancias, ha sido el Presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, quien ha propuesto al presidente de Norcorea, sentarse en una mesa bilateral de negociaciones para tratar temas que faciliten la reunificación. Ya se ha producido el primer encuentro de funcionarios de ambas partes, pero no se han develado los temas de agenda. Asimismo, Norcorea enviará, por primera vez, a sus atletas a participar en los Juegos Olímpicos de Invierno en Pyeongchang (Corea del Sur) entre el 9 y 25 de febrero próximo. Vale decir, hasta esa fecha habrá una situación de tregua y tensa calma.

Mientras tanto, EEUU ha optado por dos maniobras: (1) incitar a la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, para que declare que “China está sobrevolando muy cerca de sus rutas aéreas” (reclamo absurdo que China ha ignorado) y (2) aprovechar la coyuntura interna de Irán que enfrentaba inicialmente protestas sociales por la nominación de Jerusalén como capital de Israel, a convertirse en manifestaciones contra el régimen de Hasán Rouhaní por la subida del costo de vida. Según la agencia Al-Jazeera, grupos de infiltrados europeos de origen musulmán están azuzando estas manifestaciones para desestabilizar el país.

Está claramente demostrado que el objetivo que persigue EEUU es aprovechar los potenciales conflictos para beneficio propio, sea por ubicación geopolítica estratégica (caso Vietnam y Afganistán), conseguir petróleo barato (caso Irak), exorbitante venta de armas (Japón, Corea del Sur, Taiwán), etc. Ése es el mayor peligro que enfrenta el mundo entero: la hegemonía y avaricia de EEUU a cualquier costo.

3 COMENTARIOS

  1. Muy buen articulo, se señala claramente cuál es el juego de poder de los señores de la guerra de USA en el noreste asiático.

  2. Muchas gracias Esperanza por compartir tus conocimientos… Planteas un par de preguntas que han traído a mi memoria algunas reflexiones sobre las que leí y escribí hace años:

    A los Estados no solo no les suele sobrar el dinero, sino que acostumbran a estar fuertemente endeudados… por lo que difícilmente pueden permitirse lujos caros como participar en guerras… Pero los verdaderos gobernantes del mundo (¿quién es el verdadero gobernante… el que pide dinero prestado, o el que lo presta?) los dueños del dinero (que no necesitan presentarse a elecciones democráticas, porque al igual que los reyes medievales pertenecen a familias designadas por Dios) prestan lo que haga falta, no para gasto social, pero sí para participar en guerras…

    PAZ

¡Participa del debate! Deja tu comentario

Por favor, ingrese su comentario
Por favor ingrese su nombre aquí