SOBRE LA CRISIS MAGISTERIAL:
Es sabido por todos que la “praxis política” manda que, en medio de una crisis –en este caso la huelga magisterial-d no se hacen cambios ministeriales porque corres el riesgo de “perder” al que está en funciones y de “quemar” al nuevo. Lo que dice el “manual” es que debes esperar salir de la crisis para hacer el cambio.
Como sean las cosas, la señora Martens no se va, al menos por ahora; primero porque PPK la ha ratificado (es lo que le correspondía) y segundo, porque ella no evidencia vocación de renuncia. Dicho lo anterior, el Congreso bien podría recurrir a Interpelación una vez más y, a entender de quien escribe, ese será el camino. Digo esto porque una huelga tan prolongada, erráticamente gestionada y al borde de perderse el año escolar en diversas regiones, exige un responsable político que no es otro que la Ministra.
GESTIÓN DE CONFLICTOS Y SOLUCIÓN DE CRISIS:
La Ministra resulta reprobada, actuó dándole la espalda a una huelga que avanzó desde el Sur y se extendió a todo el país. Se recurrió al dialogo tardíamente y cuando se hizo, se convocó interlocutores no legitimados: GOREs y SUTEP Oficial, este último aupado a la huelga más por necesidad de figuración que por convicción, desconociendo que los sectores más violentos: Puka Llacta y CONARE, eran los que promovían esta huelga. De esta manera se canalizó la insatisfacción magisterial por los bajos sueldos, implementación de la carrera, condiciones de infraestructura, laborales, etc. Problemas estructurales que se revelan en un escenario de falta de legitimidad y debilidad institucional.
SOLUCIÓN A LA HUELGA:
La ministra ya no es una interlocutora válida, le toca dar un paso al costado, esperar ser interpelada y renunciar antes de la censura; en tanto, el Premier Zavala debe cerrar esta huelga y proponer nuevo ministro.
No cabe duda que es el tema salarial el punto más importante y que será el determinante para que la huelga se levante o no. 1) Se les ha ofrecido que el primer nivel magisterial cobrará S/. 2000.00 desde diciembre, pero lo más probable es que no se tenga que esperar hasta diciembre, sino que se haga efectivo desde el presente mes. 2) También es probable que se firme un compromiso para posteriores incrementos progresivos en los años que restan de este gobierno, siguiendo el modelo Toledo. 3) Seguramente se aceptará renunciar a los descuentos por los días no trabajados. Y por último, “para la tribuna”, 4) Se aceptará un ilusorio cronograma de recuperación de clases, con ampliación a una o dos horas adicionales cada día, incluyendo los sábados en aquellas regiones donde se han perdido más días y –en los casos las graves– una ampliación del año escolar hasta enero del próximo año.
EVALUACIÓN DE DAÑOS:
Se “perderá” una ministra, se generará un gasto no previsto en el actual presupuesto, se deberán programar incrementos para los siguientes años, se habrá perjudicado aún más la calidad de la educación pública “salvando” un año escolar realmente perdido y se habrá permitido el ingreso a la escena política a nuevos actores de pasado y presente antidemocrático, lo que es nocivo no solo para la educación sino para nuestro Estado Constitucional de Derecho.