Estas últimas horas estamos siendo testigos de hechos que pasarán a la historia de nuestro ya decaído entorno político, de manera que hablar de ello es ya un desgaste y sería ocioso e innecesario.
Quiero invitarlos a la reflexión sobre aquellos actos a los que sí se debe renunciar. Por ejemplo, a priorizar nuestras propias necesidades a las del entorno que me acompaña. Si como padre priorizo mis necesidades a las de mis hijos, en algún momento enfrentaré la realidad de adolescentes que, sin freno, viven su etapa de descubrimiento y enfrentamiento propio de su edad, sin parámetros ni límites parentales que los guíen por caminos más seguros y menos expuestos. Esos en los que se encontrarán con padres que viven su propia vida, con sus propias aventuras y desafíos, y no asumiendo con responsabilidad la crianza de sus hijos.
Esto significa que, sin renunciar a las labores profesionales, a los compromisos laborales, a los deseos de capacitación y formación, entre otros, encontrar espacios para compartir en familia y conversar con nuestros hijos, para llenarlos en cada etapa de su vida de momentos que los ayuden a construir una estructura de personalidad sólida es fundamental. De manera que a futuro les servirá para enfrentar los desafíos de la vida.
Esta es una tarea que todos los padres deben asumir con responsabilidad y trabajando en equipo. Padre y madre juntos tratando de dirigir el barco al mismo destino.
Si como líder en mi empresa tengo la responsabilidad de dirigir un grupo y MIS necesidades son la prioridad, estaré ciego a reconocer las carencias de mis colaboradores. No sabré escucharlos, no podré verlos, no me interesará ayudarlos, y mediré su performance solo por resultados cuantitativos.
Olvidaré que son personas con necesidades y emociones que requieren ser vistas y atendidas para mejorar su desempeño en todas las áreas. Si no renuncio a mis propias necesidades, no podré ver las de mi gente. Solo con AFECTIVIDAD lograré EFECTIVIDAD. No lo olvide… Hoy más que nunca necesitamos SENTIRNOS seguros, cómodos en espacios seguros y con gente segura.